Una foto es un acto de comunicación
Podemos escribir un mensaje para decir que te amo o podemos regalar la imagen de un abrazo para expresar lo mismo. La foto, lo mismo que un mensaje escrito, debe estar bien "redactada", debe explicarnos algo, más allá de la técnica y más cercana a los valores que nos diferencian a los humanos de los borregos.
Creemos en general que una foto es ir paseando por ahí, sacar la cámara como quien desenfunda un arma en el Far West y disparar. Estamos acostumbrados a funcionar así. Por eso creemos que el teléfono es una cámara de fotos, porque se adelanta en un disparo espontáneo a las cámaras réflex con una facilidad pasmosa.
Crear es establecer, fundar, introducir por primera vez algo; hacerlo nacer o darle vida, en sentido figurado
Una foto es necesario crearla. Te enumeramos 10 asuntos clave para saber más Fotografía. Asuntos que debes conocer cuando lees con tu mirada las fotografías y cuando las "escribes" con tu cámara.
1. Intención de la foto
Sí, sí, cada foto ES un mensaje. Para tus amigas, para tus admiradores o para ti en el futuro. El fotógrafo es un comunicador. Todo lo que se muestra en el encuadre es importante. ¿Qué asunto o emoción quieres comunicar con tu foto?
En primer lugar, tendremos un protagonista. Toda foto tiene un protagonista, sea una persona, un animal, un objeto... En segundo lugar, las circunstancias que arropan a ese prota, es decir, qué objetos aparecen acompañándolo y donde los vas a colocar en el encuadre para que le den valor o mayor sentido al protagonista.
Si eliminas las manos del encuadre, el sentido de la foto pierde intensidad e incluso claridad. El estiramiento de las manos es producido por la deformación natural de la lente gran angular.
2. El ojo se paseará por tu foto
Hablo del ojo del observador de tu foto. Si presentas una imagen blanca y nada más que blanca frente a cualquier persona, su lectura será rápida. Es probable incluso, si se ha tenido el desacierto de colgar esa foto en una galería de arte, que el observador vaya a buscar algo que identificar en la foto. Algunos dirán que no encontrar nada es el efecto maravilloso que buscaba el artista. Pero eso es pura superchería. Tengamos claro que el arte supone trabajo. Y que las palabras en manos de un embaucador nos pueden hacer creer cualquier cosa. El valor estará en la literatura, no en el objeto. Y nuestro "objeto" son fotos.
3. Crear sensaciones
Emular emociones. Es algo difícil de explicar, porque ya estamos rozando los términos artísticos (los de verdad, no los “supercheros”). Me gusta contar un ejemplo para explicar qué es eso de crear sensaciones. Tiene algo que ver con el arte abstracto.
El artista ha plasmado algo en su obra fotográfica y a los observadores se les despierta de inmediato algo intenso en su interior. Hay que tener clara la diferencia con mirar una nube y que una persona diga “ay, yo veo un osito” y el de al lado “pues no, yo veo un tigre de Bengala”. Eso no es arte, sino un juego de niños. En una de mis fotos que tenía expuesta en mi galería, la mayoría de las personas decían ver algo sexual. Muchas no supieron explicar por qué ni cómo ni dónde. Porque una cosa es la razón, perfectamente explicable, y otra la emoción.
4. Disparar de noche
Me gusta disparar fotos movidas de noche, puedes decir, creyendo que dominas el tiempo de exposición. Bueno, pues vale, lo dominas. ¿Están comunicando algo tus fotos, además de ese virtuosismo tuyo a la hora de disparar de noche? ¿Miedo, terror, quizá?
Aquí es donde el artista se ve comprometido con el mundo. Si yo muestro algo en una foto que solo me inspira a mí, porque era la foto del osito que siempre abrazaba una niña vecina mía que murió atropellada, ese mensaje solo lo entenderé yo. Para el resto del mundo será solo un osito. Si quiero que la gente sienta lástima mirando el osito, tendré que intervenirlo.
5. Fotografía periodística
O fotografía documental. Las hay buenas y malas, según su mensaje implícito. Les digo a mis alumnos en todos mis talleres: si nos hacemos una foto mala, mala, mala con el móvil, se envía la foto de inmediato por Whatsapp y después los que estamos en la galería morimos por la explosión de una bomba, esa foto malísima se convierte en un documento gráfico de importancia bestial. Lamento decirlo, pero será la palabrería y buena redacción literaria del periodista las que harán que esa foto malísima obtenga el superlativo valor.
6. No necesita más
Necesitamos fotos que se sostengan por sí mismas. Que hablen, que impresionen, que no se olviden. Si en prensa veo la foto de aquí abajo, no voy a tener que explicar nada, la foto habla por sí misma (foto de Yongzi Chu, ganadora de un Worldpress Photo en 2014).
7. La obra de arte no se explica
Lo diré una vez más: El fotógrafo es un comunicador. Si necesita a alguien que explique la foto, la foto es un fracaso.
Ya no hablo de los que se dedican a describir la foto: "foto de una mano en el suelo", sino sobre todo a los que te dictan qué debes sentir. Si te digo que la foto quiere significar la derrota de la mujer, deplazada desde otro país y que la mano es bella y se contrapone al futuro que le espera cuando trate de... Eso deben verlo los observadores y son ellos quienes deben leer en la foto lo que la foto explica por sí misma.
8. Emoción y memoria
En nuestra memoria se graban mejor los acontecimientos que han acontecido asociados a una experiencia emocional intensa. Si, como artistas, somos capaces de descifrar nuestros propios recuerdos y los recuerdos de los demás, indagando qué emociones provocan, averiguaremos donde se esconden los estímulos y podremos mostrarlos más tarde cuando tratemos de plasmar un mensaje emocional en una de nuestras fotografías.
9. Las fotografías se buscan, se trabajan
“Ah, no, yo prefiero salir a la calle y sacar lo que veo”, dicen esos que quieren parecer aventureros cool súperguay. Mira mini-cool, si sabes qué estás buscando cuando sales a la calle, vas a lograr lo que buscas o no, pero las fotos que vayas a sacar, si sabes de verdad lo que buscas, versarán sobre lo que buscas…
¿Demasiado evidente? Pues atención al ejemplo: Si te propones buscar melenas al viento en la calle o en donde sea, porque el día ha amaneceido ventoso, en primer lugar vas a tener que abanderar algún argumento, es decir, una foto de una melena al viento, ok, ¿y? Vas a tener que comunicar algo. Una foto de una melena al viento. Muy bien, ¿qué pretendes comunicar con esas melenas que encuentres? ¿Belleza, libertad, soberbia, caos?
10. Reglas de composición, las citamos una y otra vez y, aunque las olvides, te las sabes
De manera involuntaria, las aprendes día a día. Rodeados de fotos por todos lados (vemos unas 3.000 fotos al día), si alguna de esas fotos no cumple las “reglas”, lo vemos a la legua (“legua” camino que se recorre en una hora y que equivale a 5.572,7 metros).
Te animaré a que conozcas las normas de la Fotografía para que las rompas, según la intencionalidad de tu foto. No se te ocurra romper las reglas para hacer una gracia. Si haces algo “abrupto” (sobre todo en un revelado digital o en postproducción), ten piedad de ti, que sea de manera consciente e intencionada; no juegues con el “a ver qué sale”.
A crear
Ahora eres más consciente de lo que haces. Las emociones son maravillosas cuando te emborrachas con ellas, pero si las dominas, puedes llegar más lejos en Fotografía, mucho más lejos que dominando la técnica perfecta de la cámara.
Esta genial el aporte. Reciba un cordial saludo.